¿Llega a su fin la era del secreto bancario? (I)

El banco suizo UBS aceptó recientemente entregar una lista de nombres de clientes a las autoridades norteamericanas.

Salvador Trinchet, quien ya nos explicó como los deportistas famosos pagaban pocos impuestos, nos explica como está la situación actual en el mundo en relación a los paraísos fiscales. Se ha hablado de este tema estos últimos meses pero no se porque me parece que la información oficial en los medios de comunicación, como siempre es una “versión interesada”. Por este motivo prefiero saber la opinión de un experto.

Por cierto, y en relación a los bancos en paraísos fiscales, UBS, el mayor banco suizo, acaba de publicar esta semana sus resultados trimestrales y continua sufriendo una sangría en términos de pérdidas de volumen de clientes. En el tercer trimestre de este año sus clientes suizos, internacionales y norteamericanos de banca privada quitaron del banco nada menos que $17.500 millones, mas incluso que en trimestre anterior, aunque menos que el cuarto trimestre de 2008 con una desbandada de nada menos 60.000 millones de francos suizos. No es de extrañar si tenemos en cuenta los graves errores cometidos por el mayor banco suizo, detención incluida de un alto directivo en los Estados Unidos, que le están llevando a un proceso de autodestrucción, y a quien el Estado suizo ha tenido que inyectar enormes cantidades de dinero.

Salida de fondos en el banco suizo UBS en 2008-2009 (fuente: FT).

Aquí tenéis la primera parte del texto que Salvador me ha enviado:

“Después de la Cumbre del G-20 en Pittsburgh, el 25 de septiembre de 2009, nos encontramos con un mundo en que donde todos los centros financieros grandes y los extraterritoriales han aprobado las normas “anti-paraiso” impuestas por la OCDE, y los que habían erigido una serie de impedimentos para su aplicación están en el proceso de su eliminación. Un mundo en el que, en los últimos 4 meses, se han firmado más de 90 convenios de intercambio de información fiscal y se han negociado o renegociado más de 60 tratados fiscales para incorporar las normas mencionadas anteriormente. ¿Qué ha pasado?.

En Londres, el G-20 anunció el fin del secreto bancario. Desde entonces se ha producido una actividad sin precedentes en la aplicación de las normas de la OCDE sobre transparencia fiscal y el intercambio de información en materia tributaria.

El G-20 y la OCDE han optado, “para hacer frente a la evasión fiscal transfronteriza”, entre otras alternativas, por asegurar una red efectiva de acuerdos internacionales para disuadir, detectar y perseguir a los “evasores de impuestos”. En mi opinión es una opción preferible a otras que se están llevando a cabo, como la del Reino Unido presionando a las Islas Caimán para que impongan impuestos a sus residentes con la amenaza de no seguir prestándoles dinero para salir de la crisis en que se haya dicho pequeño territorio inmerso.

Sin embargo, el trabajo de la OCDE está lejos de haber terminado. Todavía hay algunos países que se comprometieron hace tiempo a aplicar las normas, pero no se ha cumplido todavía. No obstante, no hay que preocuparse. Los “informes de situación” en esta y otras áreas se pondrán a disposición de los Ministros de Finanzas del G-20 cuando se reúnan en St Andrews, en noviembre próximo. Y hay del país que no haya hecho sus deberes para no estar en una nueva presunta “lista negra”.

Avances en el cumplimiento tributario global

La OCDE está orgullosa de que “se ha avanzado”, en la lucha contra los países no colaboradores, más en los últimos 10 meses que en los últimos 10 años. Todas las 87 jurisdicciones cubiertas por la evaluación del Foro Mundial (Global Forum) de la OCDE se han comprometido en cumplir las normas de la OCDE en esta materia, y más de la mitad ya las han aplicado sustancialmente. Así:

• Más de 70 acuerdos de intercambio de información fiscal (“TIEAs” en inglés), basados en el modelo de Acuerdo del Foro Global se han firmado desde noviembre de 2008. Además, se han negociado más de 50 nuevos tratados sobre fiscalidad o nuevos protocolos a los tratados existentes, incorporando las normas de la OCDE.

• Todos los países de la OCDE ya aceptar el artículo 26 (Intercambio de Información) del Modelo de Convenio para evitar la Doble Imposición, en su versión actualizada en 2005, tras la retirada en marzo de 2009 por Austria, Bélgica, Luxemburgo y Suiza de sus reservas al artículo 26. Bélgica y Luxemburgo han aplicado sustancialmente las normas, Suiza ha firmado cinco acuerdos e iniciado diez acuerdos compatibles con las normas de la OCDE, y Austria ha modificado su legislación para permitir el acceso a la información bancaria a efectos fiscales, y ha firmado dos acuerdos e iniciado once.

• Andorra, Lienchtestein y Mónaco han adoptado las normas de la OCDE en marzo y fueron retirados de la lista de la OCDE de paraísos fiscales no-cooperativos en abril de 2009. Liechtenstein ha firmado cuatro acuerdos de acuerdo con la norma contenida en el articulo 26 y Mónaco ha firmado uno.

• Brunei, Costa Rica, Guatemala, Malasia, Filipinas y Uruguay han aprobado todas las normas de la OCDE de transparencia e intercambio de información y están en proceso de ejecutarlas.

• Singapur adoptó las normas en febrero de 2009 e introdujo una nueva legislación en junio de 2009 para cumplir con las normas de la OCDE. Singapur ha firmado 5 acuerdos compatibles con las normas e iniciado otros 9.

• Macao, que forma parte, aunque de una forma peculiar, de China, respaldó la adopción de las normas de la OCDE en la reunión del Foro Global de 2005 en Melbourne, ha aprobado una nueva legislación que le permita aplicar las normas. Hong Kong que también respaldó las normas en 2005, presentó en julio de 2009 las modificaciones legislativas que le permitan aplicar las mismas.

Mapa mundial de paraisos fiscales.

Hay que reconocer que la OCDE se muestra, hasta cierto tiempo, generosa al no exigir de forma explícita con quién un centro financiero debe firmar acuerdos de intercambio de información tributaria. Pues si se observa con qué Estados algunos centros financieros han firmado acuerdos sorprende el número de acuerdos firmados entre los mismos, y casi todos asimismo con Estados Unidos. Esto me lleva a dos conclusiones:

* Poco valor acabará teniendo para muchos países medianos y algunos grandes que un país como Lienchestein firme un acuerdo con Andorra, pues el nivel de afectados por dicho acuerdo será mínimo, y sin embargo cuenta a la hora de serle retirado el “sanbenito” de país no colaborador. Preveo que la OCDE, en poco tiempo, empezará a exigir no solo cantidad, sino también calidad. Pero como ahora se trata, en una primera fase, de llevar a “todo el rebaño” a la zona cercada, se dejarán para una segunda parte las sofisticaciones.

* Se confirma lo que algunos nos temíamos: que no todos los países van a disfrutar de la misma información fiscal sobre otras jurisdicciones. Por ejemplo, a Estados Unidos le va a resultar mucho más fácil obtener información fiscal sobre las cuentas bancarias de un residente en Luxemburgo, que a Nigeria. Todos los centros financieros se prestan a firmar acuerdos de intercambio de información con Estados Unidos, al que consideran un adversario, en estos lodos, imbatible. Pero, salvo que Estados Unidos proporcione dicha información a Nigeria (a cambio de un precio, claro), los intercambios de información volverán a servir, como en casi todo, sólo a unos Estados privilegiados. Los países miembros de la UE podrían ser siempre privilegiados si la Comisión Europea consigue que algún país miembro firme con cada uno de los centros financieros, dada las directivas de intercambio de información dentro de la UE.

Continuará…………